Sigue el paro de los docentes, pero hubo un primer avance en la negociación


Representantes del gobierno de Vidal y de los gremios se reunieron en una mesa técnica salarial, fuera de la conciliación obligatoria; era la condición que ponían los maestros; hoy y mañana, huelga nacional
LA NACION
MARTES 21 DE MARZO DE 2017
Representantes del gobierno de Vidal y de los gremios se reunieron en una mesa técnica salarial, fuera de la conciliación obligatoria
Representantes del gobierno de Vidal y de los gremios se reunieron en una mesa técnica salarial, fuera de la conciliación obligatoria. Foto: DyN / Salvador Santiago
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LA PLATA.- En el inicio de la tercera semana de paro, el gobierno de María Eugenia Vidal y los representantes de los sindicatos docentes de la provincia se reunieron ayer en una mesa técnica salarial, sin resultados a la vista. No obstante, el encuentro representó un gran avance: signó el regreso del diálogo.
El gobierno de Vidal y los docentes celebraron el reinicio del diálogo. "Hubo otra actitud por parte del gobierno provincial", dijeron los representantes del Frente Gremial.
Las dos partes en conflicto desde hace tres semanas cedieron para lograr el encuentro: el gobierno de Vidal cedió y decidió que la convocatoria de ayer no se enmarcara en la conciliación obligatoria. Ésa era la condición de los gremios para asistir a la reunión. A su vez, los gremios no vaciaron el ámbito de discusión, tal como lo habían hecho en las últimas convocatorias.
Además, a pedido de Suteba se trató el tema del ausentismo docente y las licencias, mientras que desde el lado del gobierno se reafirmó la decisión de descontar los días no trabajados por la protesta salarial.
Una vez acordadas las condiciones, los representantes sindicales y los funcionarios del gobierno volvieron a dialogar. "Es la primera vez que no nos imponen un techo", dijo María Laura Torre, del Suteba. "El gobierno ha tomado en cuenta que no podía insistir con la magra propuesta", coincidieron los representantes de los nueve gremios presentes en la negociación.
La reunión estaba convocada para las 18, pero los representantes técnicos de los seis gremios docentes -Suteba, FEB, Udocba, Sadop, UDA y AMEP, más ATE, UPCN y Soeme- tuvieron que esperar más de cuarenta minutos la llegada de los representantes de las carteras de Trabajo, Educación y Economía.
Antes del inicio de la reunión, Inés Busso, secretaria adjunta del Sadop, el gremio de los docentes de escuelas privadas de la provincia, se mostró esperanzada: "Esperemos que se pueda avanzar", dijo a LA NACION. De todos modos, indicó que el Sadop se suma al "paro nacional de todas las organizaciones sindicales docentes" de hoy y mañana.
Es el inicio de un nuevo intento de destrabar el conflicto tras diez días de paro: ayer hubo huelga -de acatamiento dispar- liderada por los gremios del Suteba y Udocba. En cambio, la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB) no hizo paro. Hoy y mañana se esperan así nuevas jornadas de protesta, convocadas por Ctera a nivel nacional. Mañana, además, habrá una movilización federal a la Plaza de Mayo. Desde la FEB advirtieron que, de todos modos, hay "flexibilidad para decidir cualquier medida que surja" en las asambleas de docentes.
Media hora antes de iniciar la reunión, los representantes técnicos de los gremios se reunieron en la sede platense de la CTA.
En tanto, la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, volvió a criticar veladamente a los gremios docentes de la provincia al subrayar que hay muchos argentinos que no consideran "la posibilidad de no ir a trabajar, aunque las condiciones no sean las mejores o las cosas no salgan". Lo hizo en un acto al que asistió junto al presidente Mauricio Macri, en Saladillo.
Allí, Vidal pidió "seguir el ejemplo de Pirincho", en referencia a Augusto Cicaré, de 79 años, dueño de la empresa especializada en desarrollo y producción de helicópteros livianos que recibió créditos oficiales para duplicar la construcción de ese tipo de vehículos.
Allí, tanto en su discurso como en la calle, el conflicto docente se hizo presente de la mano de un grupo de maestros que se acercó para reclamarle al Presidente la convocatoria a una paritaria nacional.

Primer avance

Aunque se trata de una semana más con paro en una gran cantidad de escuelas bonaerenses, el hecho de que se haya podido realizar una primera reunión no es un dato menor. Hasta ahora los encuentros habían sido convocados en el marco de la conciliación obligatoria, por lo que los gremios mayoritarios no asistieron. A la última cita habían ido solamente UPCN, Soeme, Amet y UDA. Este último dejó un escrito y se fue de la reunión. Los otros tres gremios, que en conjunto no llegan a sumar 12.000 afiliados de los 320.000 docentes que tiene la provincia, habían acordado comenzar las clases el lunes pasado.
El viernes, sin embargo, los gremios tuvieron un gesto inicial hacia la resolución del conflicto al plantear que analizaban medidas alternativas al paro, una de las cuales era con los chicos en las aulas, como tanto venían insistiendo la gobernadora y sus ministros. El mismo Roberto Baradel había dicho que en cada distrito se decidiría qué medida de fuerza tomar. Ayer, las escuelas de la provincia amanecieron, de nuevo, con paro en algunas y con clases en otras.
Ayer también Baradel recibió en la Legislatura provincial el premio Jorge Morresi, que entrega la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) a personalidades comprometidas con la defensa de los derechos humanos.
Confirmó allí la participación del Suteba en la reunión de la mesa técnica salarial docente e insistió en que "la llave para destrabar todos los conflictos la tiene el gobierno nacional, con el tema de la paritaria nacional".

Nadie gana

Del editor
La puja entre el gobierno de Vidal y los gremios docentes parece haber entrado en una dinámica de suma cero, en la que ya no puede haber ganadores. No gana la gobernadora bonaerense con la continuidad del conflicto en su territorio y no ganan los dirigentes gremiales, que día a día ven diluirse bajo sus pies la potencia de la medida de fuerza. Y mucho menos ganan los alumnos. El diálogo, ahora incipiente, parece más necesario que nunca.
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