Francisco Moreno

¡Para fuegos artificiales y novillos, no falta dinero en el Ayuntamiento; pero lo que es para el profesor de instrucción primaria, nunca hay dos pesetas en el Municipio!

A pesar de no haber cobrado su sueldo hacía más de dos años, aun no había podido acostumbrarse á no cobrar.

Amenizaban los intermedios con vino de la tierra, que le llaman así, como si quisieran distinguirlo de vino del cielo

En esto, un chiquillo de esos que siempre tienen el diablo dentro del cuerpo, asió de los pies al maestro de escuela.

Se comprenderá teniendo en cuenta que lo primero para un pueblo bien ordenado son sus autoridades.
La Gran Vía. 28 de enero de 1894. TODO LO VENCE EL AMOR Ó ESTO NADA TIENE QUE VER CON LA PATA DE CABRA —¡Cómo está la instrucción pública en España! ¡Luego se extrañan de que aumente la estadística...

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