Graham Greene, reconocía que este libro era más bien un guion, circunstancia citada por Vázquez Montalbán en su prólogo. Pocas diferencias hay, pues, entre el libro y la película. Y en uno y otra queda inmortalizado el tipo humano carente de prejuicio moral alguno que por dinero y en aras exclusivas de su propio y personal, egoísta, interés propio, va por el mundo engañando, robando, disimulando y, lo que sea… sólo es fiel a sí mismo, sólo quiere su bienestar, los demás le importan un comino. Ser, por otra parte, bien conceptuado entre los suyos porque, simplemente, no le conocen bien. El tercer hombre, de Graham Greene silvialeyendo.blogspot.com