¡Qué el aula sea un espacio para enamorarse del Bicentenario!
Comienzan las clases y docentes de escuelas de la capital y el interior se preparan para rememorar los 200 años de la declaración de la independencia, que ocupará gran parte de la agenda educativa este año.
“Tiene que ser un año distinto. Vamos a esforzarnos para concretarlo. Desde antes que comiencen las clases ya estamos trabajando en los festejos del Bicentenario”, afirma la vicedirectora de la Escuela Bernardo de Monteagudo, Marcela Villagra. Lo dice en un alto en la Jornada de Formación Permanente que hubo el viernes en todas las escuelas, promovida desde el Ministerio de Educación. Y no fue una jornada más: ahí se empezaron a cocinar muchos de los temas con los cuales esta semana los recibirán a los chicos en el aula. ¿ De qué hablarán nuestros chicos este año, en clase o en la casa, o en los recreos? Precisamente, una reflexión que une a los numerosos docentes consultados por LA GACETA es que el gran desafío es que se conviertan en protagonistas del Bicentenario.
“Los chicos usan las tecnologías para investigar. Interactúan en el Aula Digital Móvil (ADM). Se motivan mucho cuando tienen que buscar información por internet porque son nativos digitales. Nosotros nos preocupamos por lograr una sana convivencia entre la vigencia de los libros de historia y los buscadores web”, opina Villagra, que participa en la ronda de docentes de la escuela Monteagudo, el viernes por la tarde, con el ruido de la cortadora de césped como fondo.
“Debemos transmitirles a los estudiantes la importancia de vivir en la tierra donde se produjo el hecho más valioso de la historia de la Argentina. Pasamos por la vereda de la Casa Histórica sin darle importancia”, se quejó. La investigación de los personajes claves de la Independencia, los lugares que sirvieron de locaciones para reuniones y batallas, las costumbres de la época, la vestimenta y la comida son los tópicos clave de la agenda educativa de este año. “También recurriremos a a programas televisivos didácticos como Zamba de Paka-Paka”, agregó. Gabriela Infante, maestra de Matemáticas y Ciencias Naturales contó que la jornada sirvió para acatar los lineamientos de trabajo. Se hizo más hincapié en el uso de las NTICs (juegos, adivinanzas, cuadros comparativos, operaciones). “Las nuevas tecnologías incentivan más a los chicos, sobre todo a los estudiantes con dificultades de aprendizaje. Ellos tienen más motivación en el aula digital”, explicó.
A su vez, Sonia Marrades, maestra del nivel inicial, opinó: “realizaremos expresiones artísticas con los más chicos. Pensamos en murales y obras teatrales. Lo que más nos motiva es la creación de la ‘murga del Bicentenario’. Trabajaremos con los vecinos para que sea una fiesta popular.”
Todos los docentes coincidieron en el aporte fundamental que puede dar la Escuela en los festejos del Bicentenario.
En el interior
En el interior de la provincia, las escuelas también se sumaron a la nueva ola de promoción del Bicentenario. Natalia es profesora de Contabilidad en la escuela media de Trancas. Su área propone analizar las economías de los países involucrados en la gesta independista. En nuestra provincia, en particular se criaban mulas y caballos y se fabricaban carretas en el siglo XIX. El objetivo, cuenta la docente es que los chicos reflexionen acerca de los cambios y continuidades en la década de 1810-1820 con respecto a la nuestra. “En esa época el trueque era una modalidad muy frecuente. Muchas familias que mandan a sus hijos a esta escuela trabajan en la cosecha de la caña de azúcar y soja y en la ganadería y siguen con estos hábitos de comercio”, explicó.
“Queremos que nuestros alumnos tomen conciencia desde la cotidianeidad de la importancia de la Independencia y de los hombres que lucharon para conseguirla. Que se empapen y se pongan en la piel de los próceres y del pueblo también”, concluyó.
Como se vio, no todas son mieles. Por un lado, hay docentes que, cuando les preguntan cómo piensan afrontar desde esta semana en el aula la agenda del Bicentenario, afirman: “para el Bicentenario, los docentes esperamos que se resuelvan las paritarias con justicia”. Y, volviendo a los contenidos, José María Posse, docente del Colegio San Miguel critica a las gestiones educativas anteriores “porque no han venido trabajando sobre la gesta del 9 de Julio de 1816. “No se trabajó los años anteriores para dar a los maestros mínimas nociones de lo que este año ocurrirá, de su importancia, del desafío que debería ser para nuestra generación. No soy optimista. Desde el año pasado estamos haciendo trabajos de investigación con mis alumnos. Pero ellos mismos me dicen que no hay “clima” para el Bicentenario. Desde ya, pongo a 10 maestros y ocho dicen que José Colombres fue Congresal por Tucumán...si en eso se falla, imaginate en el transmitir la esencia, el objetivo del Congreso, qué decir del marco histórico que rodeaba a los héroes cívicos de aquellas jornadas...es más, se sigue repitiendo que “fueron razones geográficas” por las cuales Tucumán fue elegida sede del Congreso”, enfatiza el docente.
“Los chicos usan las tecnologías para investigar. Interactúan en el Aula Digital Móvil (ADM). Se motivan mucho cuando tienen que buscar información por internet porque son nativos digitales. Nosotros nos preocupamos por lograr una sana convivencia entre la vigencia de los libros de historia y los buscadores web”, opina Villagra, que participa en la ronda de docentes de la escuela Monteagudo, el viernes por la tarde, con el ruido de la cortadora de césped como fondo.
“Debemos transmitirles a los estudiantes la importancia de vivir en la tierra donde se produjo el hecho más valioso de la historia de la Argentina. Pasamos por la vereda de la Casa Histórica sin darle importancia”, se quejó. La investigación de los personajes claves de la Independencia, los lugares que sirvieron de locaciones para reuniones y batallas, las costumbres de la época, la vestimenta y la comida son los tópicos clave de la agenda educativa de este año. “También recurriremos a a programas televisivos didácticos como Zamba de Paka-Paka”, agregó. Gabriela Infante, maestra de Matemáticas y Ciencias Naturales contó que la jornada sirvió para acatar los lineamientos de trabajo. Se hizo más hincapié en el uso de las NTICs (juegos, adivinanzas, cuadros comparativos, operaciones). “Las nuevas tecnologías incentivan más a los chicos, sobre todo a los estudiantes con dificultades de aprendizaje. Ellos tienen más motivación en el aula digital”, explicó.
A su vez, Sonia Marrades, maestra del nivel inicial, opinó: “realizaremos expresiones artísticas con los más chicos. Pensamos en murales y obras teatrales. Lo que más nos motiva es la creación de la ‘murga del Bicentenario’. Trabajaremos con los vecinos para que sea una fiesta popular.”
Todos los docentes coincidieron en el aporte fundamental que puede dar la Escuela en los festejos del Bicentenario.
En el interior
En el interior de la provincia, las escuelas también se sumaron a la nueva ola de promoción del Bicentenario. Natalia es profesora de Contabilidad en la escuela media de Trancas. Su área propone analizar las economías de los países involucrados en la gesta independista. En nuestra provincia, en particular se criaban mulas y caballos y se fabricaban carretas en el siglo XIX. El objetivo, cuenta la docente es que los chicos reflexionen acerca de los cambios y continuidades en la década de 1810-1820 con respecto a la nuestra. “En esa época el trueque era una modalidad muy frecuente. Muchas familias que mandan a sus hijos a esta escuela trabajan en la cosecha de la caña de azúcar y soja y en la ganadería y siguen con estos hábitos de comercio”, explicó.
“Queremos que nuestros alumnos tomen conciencia desde la cotidianeidad de la importancia de la Independencia y de los hombres que lucharon para conseguirla. Que se empapen y se pongan en la piel de los próceres y del pueblo también”, concluyó.
Como se vio, no todas son mieles. Por un lado, hay docentes que, cuando les preguntan cómo piensan afrontar desde esta semana en el aula la agenda del Bicentenario, afirman: “para el Bicentenario, los docentes esperamos que se resuelvan las paritarias con justicia”. Y, volviendo a los contenidos, José María Posse, docente del Colegio San Miguel critica a las gestiones educativas anteriores “porque no han venido trabajando sobre la gesta del 9 de Julio de 1816. “No se trabajó los años anteriores para dar a los maestros mínimas nociones de lo que este año ocurrirá, de su importancia, del desafío que debería ser para nuestra generación. No soy optimista. Desde el año pasado estamos haciendo trabajos de investigación con mis alumnos. Pero ellos mismos me dicen que no hay “clima” para el Bicentenario. Desde ya, pongo a 10 maestros y ocho dicen que José Colombres fue Congresal por Tucumán...si en eso se falla, imaginate en el transmitir la esencia, el objetivo del Congreso, qué decir del marco histórico que rodeaba a los héroes cívicos de aquellas jornadas...es más, se sigue repitiendo que “fueron razones geográficas” por las cuales Tucumán fue elegida sede del Congreso”, enfatiza el docente.
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