Colegios: aumentan las cuotas, crece la inquietud de las familias


Algunas instituciones bonaerenses anunciaron subas de hasta 37%
SÁBADO 04 DE FEBRERO DE 2017
Algunos colegios cobran hasta $15.000 por mes
Algunos colegios cobran hasta $15.000 por mes. Foto: Archivo
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Marta Casas envía a sus hijas a un colegio en la zona norte, en la provincia de Buenos Aires, que anunció un aumento en la cuota del 37% para este año. Por primera vez, la suba la obligó a plantear un cambio de colegio para sus hijas. "Ellas están contentas y aunque es un esfuerzo enorme, por ahora, lo podemos pagar, así que este año seguimos", contó a LA NACION. Y admitió que otros padres no pudieron afrontar las subas y que son más de diez las familias que tuvieron que cambiar de colegio a sus hijos por motivos económicos.
Comienza un nuevo año escolar y las cuotas de los colegios vuelven a estar en el centro de la escena: los precios aumentaron y la preocupación es generalizada.
Si bien muchas instituciones privadas anticipan en octubre el monto de la cuota para el año siguiente, muchas veces vuelven a aumentar durante el ciclo en curso. Las variaciones en las subas son grandes y dependen de si los colegios reciben aportes del Gobierno, o no.
Sin embargo, no son pocos los colegios que ya aumentaron por encima del 17 % de inflación proyectado para este año; por su parte, ayer el gobierno bonaerense dispuso de topes arancelarios para los colegios privados.
Ana María Ravaglia, subsecretaria de Enlace y Cooperación Intersectorial e Institucional del Ministerio de Educación y Deporte, explicó a LA NACION que el Estado sólo ejerce control sobre los valores de las cuotas de aquellos colegios que reciben un aporte estatal. Agregó, además, que son los ministerios de Educación de cada provincia los que se encargan de fijar los topes para los valores de las cuotas.
Para aquellos colegios que no reciben ningún tipo de arancel del Gobierno, la fijación de precios se rige por la disposición 2417 de la Secretaría de Comercio, que indica que los colegios pueden aumentar el valor de sus cuotas siempre que tengan la aprobación del 50% más uno de los padres.
Ayer, la Dirección General de Cultura y Educación bonaerense estableció topes a las cuotas de los colegios privados. Mediante la resolución 37/17 dispuso bandas arancelarias para que los colegios que reciben el mismo porcentaje de aporte del Estado no tengan una arancel diferente.
"La resolución tiene por objetivo adecuar, ordenar y transparentar el aporte que hace la provincia a las entidades privadas", expresó a LA NACION el director general de Cultura y Educación, Alejandro Finocchiaro.
La resolución, además, determina que las escuelas privadas con aporte estatal deberán becar, como mínimo, al 10% de su matrícula escolar de cada nivel educativo.
"El año pasado hubo un aumento fijo en toda la provincia de Buenos Aires de 24,5. Ahora dispusimos los topes arancelarios para que sea más justo", dijo Sergio Siciliano, subsecretario de Educación de la provincia de Buenos.
Si bien la medida del gobierno de María Eugenia Vidal fija topes en los aranceles, lo cierto es que las cuotas podrán sufrir nuevos incrementos una vez que se conozca qué aumento salarial obtendrán los docentes.
"Que quede claro: los topes nos permiten unificar criterios. Las escuelas que reciben los mismos aportes del Estado tendrán que tener una cuota máxima similar entre todas. Obviamente, cuando se termine la paritaria la cuota será más cara porque hay que pagarles el aumento a los maestros. Pero los colegios seguirán respetando esta proporción", explicó una fuente del área Educativa bonaerense.
Los topes arancelarios están establecidos según el nivel educativo y porcentaje de aporte estatal que recibe cada colegio privado. Por ejemplo, en el nivel inicial y la primaria, con 100% de aporte estatal las cuotas saldrán $ 468; con 80%, $ 835; con 70%, $ 1082; con 60%, $ 1646; con 50%, $ 1923; con 40%, 2120 pesos. Los topes para las escuelas secundarias privadas serán: con 100% de aporte del Estado tendrán una cuota que costará $ 517; con 80%, $ 930; con 70%, $ 1300; con 60%, $ 1940; con 50%, $ 2140; con 40%, 2700 pesos.
En la provincia hay un total de 6440 colegios privados y 4260 son los que reciben aportes del gobierno. El sistema de las bandas arancelarias implica que según el porcentaje de salarios de una escuela que paga el gobierno, se le fijará un tope para el valor de las cuotas.
En la ciudad de Buenos Aires el año pasado, para colegios que recibían el 60% de los salarios de sus docentes, el tope que podían cobrar esas instituciones para un nivel inicial de jornada simple era de 1696 pesos mensuales.
Néstor Barallobres, secretario adjunto de la Asociación de Entidades Educativas Privadas Argentinas (Adeepra), explicó a LA NACION que ellos son miembros, como muchas otras asociaciones, de la comisión de aranceles, pero que "recién van a ser convocados por el Gobierno para definir los nuevos topes cuando estén definidas las paritarias".
Existe una gran dispersión según el tipo de colegio y los servicios que prestan. El valor máximo de una cuota de nivel inicial, en un colegio privado de la ciudad de jornada completa, que recibe aporte estatal, era en diciembre pasado de 4338 pesos. En cambio, en colegios privados sin aporte estatal, las cuotas podían llegar a 15.000 pesos.
Cada año, el 31 de octubre todos los colegios tienen la obligación de informar el valor que va a tener la cuota a principios del año siguiente. Sin embargo, en muchos casos, el valor se modifica una vez que se confirman las paritarias docentes.
Federico Johansen, director del Colegio Norbridge, dijo que si bien la institución en su sede de Pilar aumentó sólo un 6%, "de los colegios privados de cuota alta, en octubre se anunció, en general, una suba de entre el 22 y el 30% para 2017".
Muchos padres tuvieron que acomodar su presupuesto para que sus hijos puedan continuar en el mismo colegio privado. Paula tiene 39 años, envía a sus hijos a una escuela católica y detalló los ajustes que decidieron hacer este año para poder mantener los chicos en el mismo lugar: "Mi marido antes iba a trabajar en chárter y ahora va en colectivo y tren, achicamos la cantidad de horas que trabaja la empleada doméstica en casa y también nos cuidamos con los gastos de supermercado; ahora voy al mayorista y comemos menos carne".
Las quejas incluyen los gastos extras que se deben pagar además de las cuotas. Los viajes de estudios, las visitas fuera del colegio durante el año y que los chicos no usen los mismos libros del año anterior son algunas de los reclamos de los padres.
Con la colaboración de Jesús A. Cornejo

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