Acuerdo federal por la crisis educativa
Nación y provincias planean mantener la inversión y reducir la deserción
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María Elena Polack
MIÉRCOLES 13 DE JULIO DE 2016
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A 10 años de la sanción de la ley nacional de educación, aún no se resolvió buena parte del déficit estructural. Dos ejemplos alcanzan para ilustrar ese deterioro: dos de cada cuatro chicos terminan el nivel secundario, pero sólo uno de ellos comprende textos.
Para trabajar en la solución de ese y otros problemas, el presidente Mauricio Macri impulsó ayer el Compromiso por la Educación. En la presentación, realizada en el CCK, estuvo acompañado por parte de su gabinete, 15 gobernadores, ministros provinciales, 70 intendentes, empresarios, rectores y representantes de ONG.
Macri respaldó la Declaración de Purmamarca, que fijó una agenda de políticas de Estado que incluyen, entre otros temas, mantener la inversión del sector en el 6% del PBI, implementar la jornada extendida en escuelas públicas, reducir la deserción del secundario y evaluar los procesos.
"El papel resiste cualquier cosa, el tema es llevarlo a la práctica", sostuvo Macri ante un auditorio ecléctico en el que compartieron las primeras filas buena parte del gabinete nacional y los gobernadores ultrakirchneristas Alicia Kirchner (Santa Cruz), Claudia Zamora (Santiago del Estero) y Gildo Insfrán (Formosa); el antikirchnerista Juan Schiaretti (Córdoba); la oficialista María Eugenia Vidal (Buenos Aires); el integrante de Cambiemos Gerardo Morales (Jujuy) y el radical filokirchnerista Ricardo Colombi (Corrientes).
La convocatoria alcanzó a los embajadores de los Estados Unidos, Noah B. Mamet, y de Alemania, Bernhard Graf von Waldersee; a los ex ministros de Educación de Carlos Menem, Antonio Salonia, y de Fernando de la Rúa, Juan José Llach; al ex vicepresidente Julio Cobos; al ex canciller Adalberto Rodríguez Giavarini; a Graciela Fernández Meijide y al presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luis Etchevehere.
Antes de entrar en su discurso sobre la importancia de la educación, Macri se permitió bromear con la altura de su ministro de Educación, Esteban Bullrich, que lo supera casi por un par de cabezas. "Estas últimas 24 horas fueron muy difíciles. Ayer [por anteayer] estuve con Scola [Luis, flamante basquetbolista de Brooklyn Nets] y hoy con Bullrich." La humorada despertó sonrisas.
Luego, se dedicó a destacar la Declaración de Purmamarca, alcanzada por todos los ministros de Educación en febrero pasado. "Con mayor educación bajan los prejucios y crece el diálogo. Con mayor educación vamos a enfrentar este flagelo espantoso de la droga y el narcotráfico. Hoy los chicos que no estudian ni trabajan son víctimas de esto. La educación es la principal herramienta para igualar oportunidades", sostuvo.
Ni Macri ni Bullrich hicieron mención expresa al contenido de la Declaración de Purmamarca porque había sido entregada a cada invitado. Pero algunos de sus puntos salientes sobrevolaron en sus discursos. "Necesitamos que los chicos, los padres, los docentes, todos sepamos que los chicos están aprendiendo", dijo Macri en alusión a la promoción de "procesos de evaluaciones anuales en la educación primaria y secundaria para obtener diagnósticos precisos que permitan mejorar el aprendizaje de los estudiantes".
De los 13 ítems que conforman esa declaración, uno es crucial porque desalienta la crítica de la oposición sobre la supuesta visión "privatista" del macrismo. El gobierno nacional y las provincias se comprometen a "sostener la inversión en educacióndel 6% del PBI" como se fijó hace 10 años en la ley de educación nacional.
"Esperamos recibir opiniones, propuestas y críticas para ponernos un norte con seriedad, no como gobierno porque esto tiene que trascender los partidos. Hay que construir algo que sea más grande que nosotros", expresó Bullrich al anunciar que "en octubre habrá jornadas en las escuelas [para analizar la iniciativa] y a fin de año habrá un documento por la educación de cara al Tricentenario".
Bullrich informó que faltan construir 3000 jardines de infantes en el país para avanzar en la obligatoriedad del nivel inicial a partir de los tres años que, junto con implementar la jornada extendida, son considerados pilares centrales en la consolidación del comienzo del aprendizaje.
La iniciativa también impulsa "fortalecer los aprendizajes en la escuela primaria", "alentar que los mejores estudiantes de la escuela secundaria encuentren atractiva la elección por la docencia", "generar y fomentar políticas y proyectos de innovación educativa que promuevan nuevas formas de organización escolar" y "fortalecer la autonomía de las provincias y la ciudad para implementar programas, planes y proyectos acordes a sus necesidades y realidades".
Ubicados en distintos sectores de la platea estuvieron los rectores de las dos universidades públicas más usadas por el kirchnerismo para distintas cuestiones oficiales. Cerca del gabinete nacional, se sentó Aníbal Jozami, el rector de la Universidad de Tres de Febrero. Lejos de la política se ubicó Carlos Ruta, el rector de la Universidad Nacional de San Martín.
El rector del Colegio Nacional de Buenos Aires, Gustavo Zorzoli, se ubicó a mitad de camino, más cerca del sector civil dedicado a trabajar de manera voluntaria sobre la cuestión educativa como Agustina Cavanagh, directora ejecutiva de la Fundación Cimientos. En coincidencia con la campaña presidencial 2015, Cimientos había efectuado una encuesta que tuvo un resultado inquietante: para el 86% de la población "la cuestión educativa" no estaba en la agenda de los candidatos.
Dos problemas para resolver
50%
Deserción secundaria
Es el porcentaje de abandono del nivel medio; 1 de cada 2 chicos que termina la escuela no comprende los textos que lee
3000
Jardines de infantes
Es la cantidad de edificios que faltan en el país para cumplir con la obligatoriedad del nivel inicial a partir de los 3 años
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