Cumplir el calendario es garantizar los derechos

Hay un solo camino, la educación. Foro Federal

Por Diego Romero. Mtro. de Educación de Tierra del Fuego.

• TAGS
• Educación,
• Fundación Noble

• 12
  opiná
• 63
  shares

El calendario escolar busca poner en práctica diferentes tiempos pedagógicos. Actualmente el gran desafío es cumplir los 180 días de clases, garantizados por el Estado.

Un reto particular del calendario educativo en nuestro territorio provincial de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur es atender las contingencias que se devienen de la ubicación geográfica de las familias de nuestros estudiantes, que abarcan zonas con climas antárticos, cordilleranos, culturas rurales, de pescadores, urbanas de alto componente industrial, etc. En un clima riguroso, con una latitud exigente y una geografía variada, la familia organiza sus tiempos muy firmemente y la escuela, por medio del calendario escolar, debe acompañarla convirtiendo esas actividades en insumos para las actividades pedagógicas.

Existen, por diferentes motivaciones sociales y de la naturaleza, días perdidos de clases. Entonces surge el desafío de tomar las medidas necesarias a fin de compensar ese tiempo de clase perdido, puesto que entendemos la educación como un derecho, un bien público garantizado por el Estado.

Durante el inicio del ciclo educativo, nuestra provincia afrontó un conflicto docente que conllevó muchos días de paro; este Ministerio de Educación se enfrentó a la realidad de buscar acciones que contemplaran el derecho a la educación y la posibilidad de cumplir el calendario escolar. Por ejemplo, pusimos en marcha del programa de “Fortalecimiento Escolar” con el objetivo de acompañar y dar apoyo escolar a los estudiantes que fueron vulnerados por la continuidad de los días de paro. El programa consiste en clases de cuatro horas cátedra los días sábados, en los establecimientos educativos de Ushuaia, Tolhuin, Río Grande y Puerto Almanza, desde julio hasta diciembre.

La escuela es ese lugar lleno de sentidos, en que el estudiante aprende y el docente enseña. Los tiempos escolares se deben acordar en función de esas dos actividades básicas que le dan identidad como institución. El calendario escolar es, entonces, el instrumento construido por los actores y responsables del sistema que permite llevar adelante la educación planificada y democrática de nuestros alumnos.